A
continuación, Niall volvió a arrancar el coche y me dijo: - No
puedo esperar más a que lleguemos, te he preparado una sorpresa. Y
espero que te guste. - No me gustará, ¡me va a encantar! - le dije
yo con tono irónico y una sonrisa traviesa en los labios.
Cuando llegamos
a la taquilla de las entradas, aunque había mucha cola, Niall le
pidió que nos colasen y pudimos quedarnos los primeros. Niall pagó
las entradas, y comenzamos a subir. Él, de inmediato,
me cogió de la mano entrelazando los
dedos de nuestras manos (lo cual me encantaba en él) y no paraba de
mirarme sonriendo y diciendo: -¡Vamos, (tu nombre)! ¡Rápido! - y
yo le devolvía las sonrisas y 'miraditas' que él me lanzaba muy
tiernamente.
Llegamos a arriba y me detuve un momento a contemplar
las vistas tan bonitas que había desde ahí y noté como alguien me
rodeaba la cintura muy tiernamente. Me di la vuelta y me fijé en que
era Niall y me dio un beso fugaz pero increíblemente increíble.
Cuando nos separamos él me cogió de la mano, la cual tenía
congelada y le dije: - ¡Dios mío, Niall! Este
sitio es realmente mágico. ¡Eres increíble! - Una princesa como tú
se merece estar en sitios mágicos como tú. - Y una princesa
necesita a un príncipe. - interrumpí – Lo cual me recuerda, por
qué te he traído aquí. Te he traído aquí para hacerte una
proposición... - él se puso muy muy nervioso, casi no podía ni
hablar; pero me dijo mirándome a los ojos: - ¿Puedo ser ese
príncipe, (tu nombre)? - Y en ese momento, me puse roja como un
tomate y... me desmayé. Niall, de repente, se puso muy triste y me
decía: -¡(tu
nombre)!
¡Vamos, (tu
nombre)!
¡Despierta! ¡Te necesito aquí con migo! Yo lo es cuchaba, pero no
me podía mover, y caí al suelo dándome un golpe en la cabeza.
Estaba inconsciente.
Niall
llamó a una ambulancia y él estuvo con migo todo el rato, sin
separarse de mi. Cuando salió el doctor que me vio de la habitación
en la que me metieron, Niall le preguntó al doctor: -¿Doctor, como
está (tu
nombre)?
¿Qué le ha pasado? ¿Le ha ocurrido algo grave? - El doctor le
sonrió y le dijo : -No se preocupe, señor Horan, la chica está
bien, pero cuando se despertó no paraba de decir su nombre y decía
algo como: - Sí.... Sé mi príncipe. -¿De verdad, doctor? - dijo
Niall sonriendo alegremente.
Y en un segundo, Niall salió corriendo para entrar en la
habitación, vio que estaba dormida y se sentó a mi lado
susurrándome al oído: - Te quiero mucho, - Y me dio un beso en la
frente. Él se quedó toda la noche y después de una hora, escuchó
que decía: -Niall... Niall... ¿Dónde estás?
Él
reaccionó y me dijo rápidamente: - Estoy aquí, (tu
nombre).
Estoy aquí contigo.
Entonces, yo abrí los ojos y dije: - Hola Niall. ¿Dónde estamos?
¿Qué hago yo aquí? ¿Qué ha pasado? Y él abrió los ojos muy
contento e ilusionado y me dijo: - Hola, princesa. Estamos en el
hospital, porque te desmayaste. Y me ibas a responder a una pregunta.
¿Lo recuerdas? - Sí! Ahora lo recuerdo todo! Oh Niall! ¡Por
supuesto que sí! ¡Oh Dios Mío! ¡Te quiero! ¡Te quiero! ¡No te
vayas! - Él sonrió satisfecho y suspiró. Luego, me dijo:
-Tranquila, no me voy a separar de ti. Yo también, ¡te quiero (tu
nombre)!
- Y juntamos nuestros labios como la primera vez que nos besamos.
- Ven, (tu
nombre).
Te voy a coger en brazos por si no puedes andar, y te llevaré a
nuestro hotel, ¿Vale? Y no aceptaré un no por respuesta. - dijo
sonriendo. A continuación, él me cogió en sus brazos y me quedé
dormida.
*Narra
Niall
Mientras
llevaba a (tu
nombre)
hasta mi coche, no paraba de mirarla, porque parecía un bebé, un
ángel durmiendo. Era un sueño de verano. No podía dejarla ir.
La tumbé en la parte de atrás y empecé a
conducir, tan rápido como pude para llegar cuanto antes a nuestra
habitación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario