7.13.2013

CAPÍTULO 6

Pasado un rato, nos dimos cuenta de la hora, así que pedimos un taxi y fuimos para el aeropuerto, donde nos esperaba mi tía.

Cuando nos subimos al avión, pudimos ver que Harry venía corriendo como un loco con unas bolsas de tiendas, donde había estado con mi tía.

Pero ella vino antes que Harry, porque él se había entretenido bastante y mi tía no se había dado cuenta. Y de repente, él gritó:
- ¡No os olvidéis de mí! ¡Esperádme! ¡Por favor, chicos!
Por poco despegamos y nos dejamos a Harry allí. 
Niall no paraba de reírse y el pobre de Harry estaba que no podía ni hablar de lo cansado que se encontraba de la carrera que se había pegado hasta el avión; y cuando se sentó junto a mi tía no se lo creía, porque la verdad es que lo había pasado fatal.
- Pff... Menos mal que me habéis esperado, ¡Muchas gracias, (tu nombre)! - me dijo.
- No pasa nada. Seguro que tú habrías hecho lo mismo por nosotros. Jajaja. - respondí.
- Bueno, yo me voy a dormir un ratito, que estoy hecho polvo. *bostezo* Además, no he dormido nada esta noche. - dijo bostezando entre palabra y palabra. 
Y cogí una manta pequeñita y tapé a Harry, porque noté un poco de corriente y sabiendo que estábamos a finales de Noviembre, no quería que Harry se quedase ronco por el resfriado que podría pillar. Pero de repente noté como alguien me cogía por la cintura y me di cuenta de que era Niall, quien me dijo susurrando:
- Deja que lo haga yo, que seguro que tú también estás muy cansada; porque este día ha sido de muchas emociones. ¿Me equivoco, (tu nombre)? - había una sonrisa traviesa en sus labios.
- De acuerdo... Muchas gracias, Niall. - respondí suspirando.
Entonces, me tumbé en mi asiento y mientras comenzaba a dormirme, pude escuchar a Niall tocando la guitarra pero al final, me dormí.


No hay comentarios:

Publicar un comentario